CELTIBERIA, país de las cuatro culturas
EL INCREÍBLE PATRIMONIO DE LA ESPAÑA MÁS VACIADA
Javier Hernández Ruiz
La España vaciada no está vacía. Está repleta de patrimonio ecocultural. Esto es lo que pretende exponer la Guía turística de la Celtiberia. Un país imaginado. Imagínaos una región natural en Europa -la cordillera Ibérica en su parte norte y centro- que conservase los testimonios escritos más importantes de la Antigüedad en lengua celta (Bronces de Botorrita, téseras y otras inscripciones), ciudades celtibéricas luego romanizadas, los cascos más destacados de la Edad del Hierro (Aratis) y que, además fue la responsable -en las guerras celtibéricas del siglo II a.C.- de que hoy tengamos un calendario que empieza en enero en lugar de en los idus de marzo; a ello le podemos añadir una buena colección de fíbulas, panoplias militares, objetos cotidianos, cerámicas con gran valor iconográfico, el único santuario donde se advoca a Lug (Peñalba de Vilastar) y observatorios astronómicos que siguen las pautas del calendario celta. Y esto limitándonos solo a los celtíberos, la civilización más importante y documentada de la Céltica en la península ibérica.
Esta comunidad cultural (koiné), que llegó a su culminación justo antes de la llegada de Roma (siglo III-II a.C.), se extendía por un territorio continuo que hoy abarca ocho provincias de cuatro comunidades autónomas, Aragón, las dos Castillas y la Rioja; constituye una región natural (norte y centro de la cordillera Ibérica y una parte del reborde nororiental de la Central) en la que se basa la guía. Fue la Celtiberia, rescatada por los visigodos y los árabes (Santabariya), una tierra de frontera en la Edad Media, las extremaduras donde, para estimular la repoblación, surgieron estructuras democratizadoras: fueros, milicias concejiles o los concejos que se reunían en los pórticos de las iglesias que nacieron aquí a fines del siglo XI (la Celtiberia atesora el 90 % de esta tipología románica). El listado de hits patrimoniales es tan impresionante como desconocido: el mejor mudéjar del mundo en las comarcas aragonesas, la casi totalidad de la literatura aljamiada (en romance con grafía árabe), el parque jurásico más relevante de Europa (icnitas), singulares catedrales y monasterios, el rosario de ciudades medievales más rico de España.
Ofrece además este despoblado de 7 habitantes por km2 un espacio cualitativo que, al perder el tren de las sucesivas industrializaciones, ha preservado magníficamente espacios naturales, antrópicos, arquitectura tradicional, ritos, tradiciones, leyendas… Los despoblados también pueden ser una oportunidad para el visitante sensible, sobre todo cuando están llenos de patrimonio y de imaginarios potentes, como es el caso. Nos faltaba ese concepto talismáncio, como el del Camino de Santiago, pero el término Celtiberia cubre sobradamente esa deuda y puede convertir a estas tierras abandonas del sistema Ibérico en uno de los destinos más preciados de la España interior.